Yo sé de aquel misterio que se esconde en tu mirada
yo sé de aquellos sueños deshojados por tu almohada
y sé de aquel sendero secreto que llega hasta tus labios
tantas veces en sueños lo he cruzado.
...y sé de aquellos momentos en los que deseas ser tú misma.
Yo te he visto con tus tijeretas construyendo palacios de cartón
yo te he escuchado susurrar aquella triste melodía, la recuerdas
la que cuenta la historia de una niña perdida en un viejo jardín
lo recuerdas, cerca del portal donde por primera vez nos vimos.
...y como cada noche cuando en sueños jugamos a conocernos.
Yo sé de aquella vieja muñeca de trapo que no quieres tirar
yo sé de aquella canción tierna y dulce que te cantaba mamá
y yo lo sé porque al verte puedo leer en tus ojos
la paz e inocencia que reflejas en mi alma.
...y sé que me has visto mirarte como yo te he visto mirarme.
Y no te dejas amar, y me haces penar
desordenas todo en mi cabeza con sólo pensar
que sin ti nada volverá a ser igual
y que si no estás mi vida será un sueño más.
Yo sé de los colores que adornan tu belleza
y aún sabiendo que nunca me querrás
sigo terco ahí, aferrado a una esperanza
que nunca me diste y nunca te pedí.
...y hoy sólo quiero pedirte que entiendas que mi amor no es mentira.
Yo te he visto llorar tras el espejo, sé de aquel mar de lágrimas e ilusiones
donde naufraga tu corazón, y donde estallan tus huracanes de pasión
porque yo te he visto caminar sola con tu candil en aquella noche oscura
buscando el sol bajo la lluvia, recuerdas que lo encontramos al mirarnos.
...y he visto la vida como una paloma volar de tus manos.
Y no me culpes si pretendo, no me juzgues si no entiendo
que si a veces procedo y me equívoco, no es por mala intención
que yo sólo quiero calmar tu temor, darte todo mi amor
y procurarte mañana un mundo mejor.
...un mundo mejor para ti, y nuestro amor.
Noviembre del 2005